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No pudimos verlos y resulta que prorrogan El Rey del Playback en los Teatros Luchana, o sea que voy a verlos y ¡¡¡Zas!!! 50 minutos fantásticos, nos lo pasamos pipa.
Las dos últimas actuaciones serán los días 17 (20:30), y sábado 18 (21:00)
¡¡¡No te las pierdas!!!
Con El Rey del Playback 1.150.000 personas siguen al actor y bailarín Luciano Rosso en redes sociales, sumando sus cuentas de Facebook, Instagram, Twitter y su canal You Tube, que ya supera los 424.000 suscriptores. Sin considerarse youtuber, sus vídeos de playbacks registran millones y millones de reproducciones. “Los médicos se los muestran a sus pacientes porque les ayudan a sonreír y a encarar situaciones difíciles”, apunta el creador de la primera youtubeterapia contra la depresión. El también conocido como ‘Rey del Playback’ comenzó grabándose con una canción de Gloria Trevi. “La subimos a redes y fue un boom”, añade. Más allá del histrionismo, su fonomímica (arte de fingir reproducir la voz grabada propia o ajena) procede de un dominio magistral del gesto y la improvisación. El teatro físico de Luciano Rosso propone un juego de espejos con el espectador. “Tú te ves reflejado, pero otro te pone el cuerpo en este laberinto”, subraya el polifacético artista. ¿influenceractoryoutuber? Los vídeos de Luciano Rosso no sólo proyectan una estrategia de marketing teatral 2.0. You Tube y las redes sociales se convierten en el primer escenario de su propio personaje, un palco viral, accesible al público desde cualquier parte del mundo.
¿Te asusta o te gusta? A pesar del atrevido carácter experimental de ‘Furor’, Juan Jiménez, director de los Luchana, elogia su complicidad con el espectador: “Recurre a escenarios costumbristas de la modernidad líquida, como los talent show de voz televisivos, y su repertorio musical es popular y cantable”. “El púbico es el mejor termómetro de la salud de un espectáculo”, asegura Jonathan Zak, productor de ‘Furor’ junto a Maxime Seugé. “Nos quedamos en Madrid porque su cálida acogida ha superado todas nuestras expectativas”, añade. El actor se pone al servicio de ‘Furor’, que desdibuja la línea entre realidad y ficción. Una mano maestra lo moldea, lo empuja a enfrentar lo inesperado hasta el límite de su capacidad. “Gracias al poder de la imaginación, descubrimos cuanto arte cabe en un cuerpo”, apunta Luciano Rosso. Rosso e Israilevich comparten idea, dirección e interpretación, juegan a complacer la mirada ajena, mientras cuestionan su propio trabajo teatral, el éxito y el fracaso. Historias abonadas a un terreno incierto, un recorrido con o sin buen puerto, “a buen seguro, único e irrepetible”.
