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Texto: Redacción Fotos: Mario Cruz Leo
La capital de la Ribera, Aranda de Duero, se convierte un año más en la protagonista indiscutible de toda Castilla y León. Por su tradición ganadera, vitivinícola, gastronómica y patrimonial, costumbres tan arraigadas que han llegado a convertir a Aranda en toda una localidad de culto para la enogastronomía y nada mejor para disfrutar de ella que con su plato estrella, el lechazo, en las XIV Jornadas del Lechazo Asado.
Y, coincidiendo con la celebración de las XIV Jornadas del Lechazo Asado, se regalará a todas las personas que viajen hasta Aranda y disfruten del menú especial de Jornadas por 37 euros un producto de la tierra: una morcilla arandina o una botella de vino de la D.O. Ribera del Duero.
Estas jornadas están organizadas por el Ayuntamiento de Aranda de Duero, la Asociación de Hosteleros de Aranda y Ribera ‘ASOHAR’ y el Consejo Regulador de la D.O. Ribera del Duero, y en las mismas colabora la Torta de Aranda y la Lechuga de Medina. Los asadores participantes en las XIV Jornadas Gastronómicas del Lechazo Asado son: Asador de Aranda, Mesón El Cordero, Asador Casa Florencio, Mesón El Pastor, Asador Restaurante Lagar de Isilla, Mesón de La Villa, Restaurante Finca los Rastrojos, Restaurante Aitana, Restaurante Asador Montermoso y Asador Casa José María.
El Río Duero es el apellido de esta localidad burgalesa; su vida y la de sus gentes se desarrollan en torno a la Ribera del Duero que crece, emprende y está en contínuo movimiento. Prueba de ello son las cuatro playas fluviales y el recorrido en barca por el anillo verde de la Ribera, que parte del Parque de Barriles, continúa por la Curva del Amable hasta llegar a la senda de Allende Duero, pasando por el Puente Aranda hasta llegar a la ruta GR-14, una buena manera de descubrir un paraje casi único de la provincia de Burgos.
A lo largo de este recorrido, que dura 45 minutos aproximadamente en barca, se podrán realizar paradas para disfrutar de las cuatro playas fluviales: Picón, Barriles, Tenerías y la de uso exclusivo de emergencias, todas ellas habilitadas con ducha, rampas para acceder al agua y espacio para tomar el sol o divertirse practicando deportes de aventura como la tirolina o puente tibetano.
En 1503 se dibujó el primer mapa de Aranda de Duero, considerado uno de los más antiguos de España y en el que se aprecia claramente cómo se dividía la localidad en dos barrios: el cristiano y el judío. Cuenta la leyenda que el pintor del mismo dejó escrito “en el plano me hallaréis”, así que todos los viajeros que se acerquen a esta villa realenga tendrán la oportunidad descubrir este misterio a través de las visitas teatralizadas.
Estos itinerarios comienzan en la Plaza Mayor, y de ahí parten hasta la zona histórica, paseando por la judería hasta llegar a la iglesia de San Juan para observar las morerías. Esta visita finalizará en el puente románico de la localidad. Con estos recorridos los viajeros
descubrirán un ‘misterio’ ocurrido hace 500 años y tratarán, gracias a los actores que interpretan diferentes papeles de personajes de la época, de descubrir la incógnita que dejó escrita el pintor del mapa: “en el plano me hallaréis”.
Dichas representaciones son de carácter gratuito, y se llevarán a cabo de martes a viernes a partir de las 19.00 horas, y los sábados y domingos en horario de 13.00 y 19.00 horas*. Para poder disfrutar de esta visita hay que inscribirse en la Oficina de Turismo de Aranda de Duero, ubicada en la Plaza Mayor que, además, será el punto de partida para este recorrido de una hora y media de duración.
¿Alguien dá más?
Pues Aranda dá más, la XIX edición de la exposición de Las Edades del Hombre, uno de los hitos culturales de arte sacro más destacados a nivel nacional e internacional: ‘Eucharistia’, una muestra que estará recogida en dos importantes sedes arandinas: la Iglesia de Santa María la Real y San Juan, hasta el próximo 10 de Noviembre.
Además hay que recordar que el subsuelo de Aranda de Duero cuenta con siete kilómetros de bodegas subterráneas que recorren esta localidad, muchas de ellas visitables todo el año y algunas solo abiertas durante las Jornadas del Lechazo.
En definitiva, un destino maravilloso de Castilla y León, lleno de rincones mágicos para descubrir y donde vivir cientos de experiencias únicas e inolvidables en compañía de familia o con amigos.Como dice su eslogan: Aranda de Duero, la Ribera que me gusta, la Ribera que se mueve.
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