www.turismoviajes.es Gastronomía
El espárrago es un alimento simple pero muy rico, tanto en sabor, como en aportes al organismo, unas características que lo convierten en un gran aliado para la salud.
Esta hortaliza tiene su origen en el Mediterráneo, ya en tiempos de griegos y egipcios los espárragos contaban con sus seguidores. Como Hipócrates, médico heleno que recomendaba, según cuentan, té de espárragos por sus beneficios diuréticos. Igualmente, su raíz era utilizada para aliviar las picaduras de abeja, además de como remedio ante el siempre molesto, independientemente de la época, dolor de muelas. Incluso se pueden encontrar ciertas referencias que hablan de los espárragos como ingrediente para pócimas afrodisíacas.
Atraídos quizás por todos estos detalles fueron ya los romanos los que trajeron los espárragos a España. Y de ahí hasta nuestros días, otros tiempos en los que se puede encontrar este producto prácticamente todo el año en el mercado. Sin embargo, su temporada se sitúa entre marzo y junio, si bien entre el cultivo en invernaderos y las conservas, permiten consumirlos en cualquier momento.
Según ciertos parámetros hay diferentes categorías de espárragos, extra, primera y segunda, clasificados por su color, turbidez o uniformidad. Aunque la gran división habría que hacerla entre los blancos y los verdes trigueros. Los primeros deben su forma y tonalidad a su situación bajo tierra durante su crecimiento, ocultos al sol. Mientras que el verde, al contrario que el anterior, crece con la luz suficiente para desarrollar su sabor y la clorofila, el pigmento que le da su color característico.
Beneficios
Los espárragos disponen de un elevado contenido en proteínas y nutrientes, a la vez que bajo en calorías, sodio y colesterol. También son ricos en ácido fólico, algunas vitaminas como C y E, es un importante antioxidante y contienen gran cantidad de histonas, proteína que controla el desarrollo de células cancerígenas.
Cerca del 90% de su contenido es agua. Esta composición permite que tengan un importante efecto diurético. Asimismo son recomendables para personas que padecen estreñimiento gracias a la inulina y oligofructosa, compuestos que influyen en la flora bacteriana del colon. Hasta ciertos estudios hablan de la hoja de los espárragos como buenas para combatir la resaca y proteger el hígado de las toxinas producidas por el alcohol.
Para todos los gustos
El espárrago tiene múltiples formas de ser cocinado, a la brasa con un poco de sal y aceite de oliva, natural en una ensalada, con salsa, gratinado, frito, en puré, revuelto con jamón, en tortilla, hasta en guisos. También en conservas, en trozos o enteros, o sólo las puntas y según sea el tipo de elaboración existen distintos calibres, desde delgados a extra gruesos.
A la hora de la compra hay que optar por los que tienen las puntas cerradas y compactas, color uniforme y tallo firme y recto. Mientras que al consumirlos es necesario hacerlo lo antes posible para que no pierdan sus propiedades, aunque se pueden envolver en un paño húmedo y aumentar de esta manera la conservación en la nevera de un alimento, que es fuente de energía, muy sencillo y beneficioso para la salud.
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