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Extremadura Termal, nueva marca de promoción turística creada por la Asociación de Balnearios de Extremadura,surge para dar a conocer el potencial en turismo de salud y bienestar con el que cuenta el territorio extremeño.
Está integrada por seis centros termales —Alange, El Raposo, Salugral Termal Resort, Brozas, Fuentes del Trampal y Baños de Montemayor— en torno a los que surge un sinfín de propuestas para todo tipo de viajeros que van más allá de los tratamientos wellness tradicionales, y que permitirán mostrar la riqueza y los productos turísticos extremeños, entre los que destacan la gastronomía, el ocio, la naturaleza, la historia, la arquitectura, la cultura y el patrimonio.
NACE EXTREMADURA TERMAL
Seis estaciones termales, repartidas entre las provincias de Cáceres y Badajoz, componen la Asociación de Balnearios de Extremadura: Alange, El Raposo, Salugral Termal Resort, Brozas, Fuentes del Trampal y Baños de Montemayor, seis centros que, por la zona en la que se encuentran y las aguas mineromedicinales que utilizan para la realización de tratamientos —ricas en azufre, bicarbonato o hierro, entre otros— se han convertido en lugares de peregrinaje para muchas personas. Y es que las terapias naturales ganan adeptos, ahora que cuidarse se concibe no solo como un remedio o una manera de prevención, sino como una forma de descansar y hacer turismo. Juntos forman ‘Extremadura Termal’.
Aunque diferentes, casi todos tienen en común tres cosas: cuentan con aguas declaradas de utilidad pública en los albores del 1900; se trata de establecimientos cuya gestión ha pasado de generación en generación desde principios del siglo pasado, lo que les confiere un ‘aire’ familiar; y cuentan con un elevado valor patrimonial, ya que unos fueron construidos sobre vestigios de época romana y otros sobre cimientos históricos que, cientos de años atrás, ya aprovechaban las propiedades de sus manantiales para beneficio de la gente del lugar. Pero, por separado, cada centro tiene alguna singularidad que lo hace único, lo que permitirá al viajero decantarse por uno u otro en función de sus gustos y necesidades.
Especialización y producto diferenciado
El Balneario de Alange, situado en la localidad del mismo nombre (Badajoz), es un verdadero templo romano, fechado en el siglo III, que hoy en día se mantiene en uso. Cuenta con hotel, restaurante, piscina interior de hidromasaje y otra exterior, ‘pilas’ (bañeras originales de piedra auténtica), dos termas romanas, salas para tratamientos específicos y un jardín exterior para terapias Kneipp. Además, permite al usuario tomar baños en la fuente del manantial, donde se encuentra el corazón del balneario. Desde el punto de vista de los tratamientos, Alange destaca por sus terapias para combatir el estrés y paliar dolencias relacionadas con el sistema nervioso.
El Raposo, que tomó el nombre de la localidad en la que está situado (Badajoz), por la cantidad de ‘raposos’ (zorros) que había en la zona, está situado en la Vía de la Plata, en una finca rodeada de abundante vegetación y plantas aromáticas, muy próxima a la localidad pacense de Zafra. Se trata de un centro de tradición familiar, cuyas aguas fueron declaradas de utilidad pública en 1926, y que está especializado en la aplicación de lodos naturales.
Éste es uno de los pocos balnearios de España que dispone de este tipo de tratamientos, especialmente indicados para dolencias del aparato locomotor, sin olvidar el relax que provoca en el cuerpo. Entre sus instalaciones, formadas por un hotel y un balneario y certificadas con la Q de Calidad desde 2008, destacan una piscina interior climatizada con circuito termal, una piscina exterior, salas de masaje y belleza y una extensa variedad de tratamientos de relax, además de un magnífico restaurante —de menú y a la carta—, cafetería, biblioteca, sala de formación y salones para la celebración de todo tipo de eventos, familiares y de empresa.
Salugral Termal Resort, levantado en una finca de más de 75.000 metros cuadrados de extensión, se encuentra en plena Vía de la Plata, en el valle del Ambroz, junto a la localidad de Hervás (Cáceres). Junto a los cimientos de un antiguo balneario, cuyas aguas fueron declaradas de utilidad pública en 1889, se ha construido este moderno centro de salud y belleza, donde se practican tratamientos de última generación, entre cuyas instalaciones destaca una imponente piscina interior con acceso directo y vistas a la piscina exterior, jacuzzis, salas de tratamientos y un completo circuito termal, además de un hotel de cuatro estrellas y salas para reuniones.
También en el valle del Ambroz se encuentra el balneario Baños de Montemayor, en la localidad del mismo nombre. Se trata de una villa termal formada por dos edificios, situados uno enfrente del otro: el primero es la antigua terma, fechada en época romana, lugar donde brota el manantial de aguas mineromedicionales utilizadas. Tras varias remodelaciones y ampliaciones, este centro cuenta hoy en día con una piscina interior —situada en una de las bóvedas originales de la villa romana—, circuito termal, y salas de masajes y tratamientos de belleza, además de un pequeño museo en el que se exponen piezas originales encontradas en las termas del balneario.
Y el segundo edificio es una construcción moderna, que viene a completar los servicios prestados en el centro original. En su interior se encuentra la unidad de tratamiento de enfermedades respiratorias de la península, junto con otras salas de tratamientos para pacientes, cuyas terapias están especializadas en tratamientos del dolor, afecciones reumáticas y problemas de la piel. De manera conjunta, la Villa Termal de Baños de Montemayor cuenta con más de 700 camas en diferentes hoteles y hostales situados junto al balneario.
Por su parte, el Balneario de Brozas, conocido como los antiguos Baños de San Gregorio y declarado como tal desde 1869, está situado en plena dehesa extremeña, en el término municipal de Brozas, a solo 45 kilómetros de Cáceres y 30 de Portugal. Su principal activo es el entorno en el que se encuentra ubicado y, sin duda, su agua mineromedicinal.
Entre sus instalaciones, remodeladas en el año 2005, destacan múltiples salas de tratamientos termales —especialmente indicadas para calmar dolencias relacionadas con el aparato locomotor, la piel, el sistema nervioso o simplemente como técnicas de relajación— y una piscina termal —cubierta en invierno y exterior en verano—, además de un hotel, restaurante especializado en cocina regional y cafetería, jardín, terrazas, solarium y zonas de reposo. Tanto el Hotel como el Balneario están certificados con la ‘Q’ de calidad turística.
Y Fuentes del Trampal es el nombre del balneario situado en plena dehesa extremeña, en el término municipal de Montánchez (Cáceres). Con un manantial de agua rica en componentes oligometálicos —como el hierro—, sus tratamientos están especialmente indicados para paliar reumatismos, artrosis, alergias y afecciones cutáneas. Como complemento a sus instalaciones termales, modernas y con unas increíbles vistas a la dehesa, el balneario cuenta con alojamientos, restaurante y amplias zonas ajardinadas.
En definitiva, seis centros en los que la moderna tecnología se une a la tradición y la historia de nuestros antepasados, quienes ya supieron aprovechar las propiedades beneficiosas del agua mineromedicinal que brota de los manantiales extremeños. Ahora es el turno de que todo tipo de viajeros, aquellos que se desplazan en familia, los que lo hacen en pareja o con amigos, y los que lo hacen por motivos de salud, disfruten de sus instalaciones y tratamientos, ya sea en búsqueda del bienestar o para disfrutar de todo el ocio que proporcionan: desde una cuidada gastronomía, hasta experiencias únicas al aire libre, pasando por el acercamiento al patrimonio histórico y la cultura que encierra un territorio tan rico como el extremeño.
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